El 16% de la población mundial presenta algún grado de discapacidad o dependencia, respecto de las cuales, la principal fuente de cuidados la proporciona mayoritariamente algún miembro de la familia y en menor medida amigos o vecinos. Cuidar a un familiar adulto o mayor puede provocar consecuencias negativas en la salud de la persona cuidadora, siendo la depresión una de las consecuencias más frecuentes.
Entre los factores protectores de estas consecuencias negativas que aparecen en la literatura está el apoyo social, el cual parece que podría desempeñar un papel importante en el mantenimiento o recuperación de la salud emocional de las personas cuidadoras. Pero, a pesar de lo anterior, no existe una revisión sistemática con meta-análisis que permita sintetizar y cuantificar el efecto del apoyo social sobre la depresión.
Para estudiar la relación entre los síntomas depresivos y el apoyo social realizamos una búsqueda bibliográfica sistemática en cuatro bases de datos obteniendo finalmente 93 estudios. Con los resultados de estos estudios realizamos un metaanálisis.
Los resultados que obtuvimos fueron:
- El apoyo social percibido (subjetivo; valoración del apoyo recibido) y recibido (objetivo) son constructos diferentes que influyen en los síntomas depresivos de las personas cuidadoras informales.
- El apoyo social percibido es un importante factor para prevenir o aliviar los altos niveles de síntomas depresivos en la población cuidadora familiar.
- La relación entre el apoyo social percibido y los síntomas depresivos no varía sustancialmente entre la población cuidadora de personas con diferentes causas de dependencia.
- El efecto del apoyo social percibido sobre los síntomas depresivos es clínicamente relevante.
